miércoles, 15 de octubre de 2014

Peligro

Llegaste como en un bote salva-vidas para recogerme y hacerme fuerte. Lo sabías todo de mi, quien si no iba a saberlo, si tú eras mi mejor amigo, tu no podías hacerme daño. Te deje entrar en mi vida, a pesar de todo.

10-7-2012: El humo de su boca


Y el tiempo se para.
Entre una particula de aire puro y una de humo tóxico se libra una batalla. Mi batalla. Esa que me impide vivir el aquí y el ahora, la que me ata al pasado y me encierra en el "nunca".
Porque no puedo decirlo, ni siquiera me dejo pensarlo, está mal, no debería....y sin embargo, mis sueños me traicionan y mientras gritan "¿Y qué más da?", pero si da.....da miedo.
Te acercas, me muero...pero no me atrevo, te beso en la frente y me voy. Llamame loca, debe ser porque hace dos semanas besabas a otra.

Te dejé entrar después del mayor error de mi vida, que fue intentar quitármela. Te dejé entrar, aunque me moría de miedo después de que aquel chico me partiera en dos. Yo te dejé entrar.


14-3-2013

Porque en la intimidad de un beso rescatas los restos de mi naufragio, porque cada paso que doy es hacia donde tú estas, porque lo mejor de mí es tenerte a ti, porque el miedo sólo es un monstruo que asusta, como un matón del cole al que hay que plantarle cara para que te deje en paz. Porque tenemos de nuestra parte a la confianza y al respeto, al amor, a la esperanza y a las ganas. Porque nunca nada nos ha parado, ni nos va a parar.


23-7-2013

Es verdad que las cosas sólo se sienten de la forma más intensa posible cuando se sienten por primera vez, pero en ese momento...en ese momento no importa nada más. Nada, absolutamente nada puede hacer que bajes de la luna.

No importa que haga frío, o que esté lloviendo. Simplemente sales a la calle esperando a que pase. Y pasa.


Sientes por primera vez que las cosas marchan como deberían, que todo está en orden, que todo va bien...bien de verdad y que todo tiene que ver con que esa persona te hace fuerte, aunque desde fuera todo parezca un caos, aunque el mundo haya empezado a girar demasiado deprisa ahí fuera. No importa. Porque sabes que está, porque quieres que esté. Y te das cuenta del tesoro que tienes entre las manos cuando le acaricias,  o cuando te abraza para dormir y ambas respiraciones se funden en una sola, calmada y tierna. Entiendes que es ahora o nunca, que jamás volverás a sentir algo así, que las horas, los minutos y los segundos no van a volver y que el tiempo irrevocablemente avanza. 

Párate a pensar. 

Piensa en una tarde de verano mirando las nubes, en un cigarro a la salida del instituto, en películas, en canciones, en historias, en verdades y verdades a medias. Piensa en un parque cualquiera, en Gru Mi villano Favorito, en mi necesidad obsesiva de tener siempre la última palabra. Piensa en cuando me enfado...y en cuando te enfadas...cuando estamos raros, cuando tenemos cosas pendientes. Piensa en palabras, en miradas y en gestos cuando todo vuelve a la normalidad. Piensa en que te abrazo en silencio y te aprieto con todas mis fuerzas mientras te ríes de mi porque a penas lo notas.

Piensa. ¿No es genial?

Hablas. Me río. Hablo. Te ríes. Nos reímos. Me besas. -"No, yo más"-Vale, pero muy poco. 
Me colocas el pelo detrás de la oreja. Te encanta. Te quiero.


25-8-2013

Dime si es normal creer que puedo rozar la luna cuando estamos a solas y sentir que nada merece la pena cuando me acuesto por las noches en la soledad de una cama fría incluso en agosto. Explícame cómo es posible pasar de cero a cien cuando te veo aparecer a lo lejos en la recta que hay de camino a mi casa.



No sé qué ha cambiado, no sé en qué momento he pasado a ser una mas. No sé qué he hecho para que me pierdas así el respeto. NO sé qué ha pasado para que dejes de valorarme hasta tal punto que has llegado a hacerme daño tan profundamente que no sé si podré volver a confiar en ti jamás.
Yo te quería, sabes? te quería muchisimo más de lo que te va a querer NADIE...



Tengo miedo. Creo que es normal.
Odio todo esto, lo odio y no sabes cuanto. Te odio.
No me encuentro. Ya ha pasado algún tiempo y sigo siendo incapaz de seguir mi camino.
El frío nos ha pillado descalzos este año, corriendo desnudos por el jardín del Edén. Va a ser, sin duda, el invierno más gélido en años y mira que yo he pasado frío en la vida.